lunes, 22 de diciembre de 2014

Tiempo de invierno



Para vivir el invierno he decidido
ponerme a caminar por estas calles,
un ánfora de ron y un cigarrillo
que aminoren en parte soledades.
¡No he de fijar mis ojos en los puertos
de esas lucecillas encendidas
que imitan el color de los luceros
entre hojas de árbol suspendidas!
No me place festejar los nacimientos
esta época se antoja andar a solas
sin libros ni guitarras con silencio
¿Qué más puede pedir el alma toda?
Ya mañana de bajo de una aurora
en cada despertar  iré gritando
la ley de oro de este que se aclama,
por una eternidad crucificado.
¿No nace acaso del diario con la aurora?
¿No muere acaso colgado de ese palo?
Bien déjenme andar en soledades
este invernal camino en que ha nacido,
no me place ni el verso ni las sales
solo un vaso de ron y un cigarrillo.

Antonio Ruiz Ruiz


martes, 16 de diciembre de 2014

Te recuerdo...



  Te recuerdo en la piedra, en el sol, en la luna descalza que camina por el mar;

te recuerdo en todas las cosas que hay sobre la tierra, porque eres la tierra,

en todas las cosas que hay en el cielo porque eres el cielo y la vida y la muerte.
  
  Eres este instante engrandecido, incandescente, este cúmulo de días donde convergen

los tiempos.
  
  Porque todo se funde en este resplandor que llamamos existencia.



                                    
                                        Antonio Ruiz Ruiz

jueves, 27 de noviembre de 2014

Al alba


Al alba

 

Se han caído las hojas

y la noche

se despide llevándose en sus sueños

el despertar de un hombre;

ojo, pie, mano,

cabello de luna entretejido,

barro que entre el barro se confunde

lapidado silencio de las horas.

Embarcación de aurora anegada,

de pájaros, de gritos que anuncian

silentes despedidas

entre el débil oscilar de algunas manos

y el temblor necesario de una lagrima.

¡Qué soledad que dejan los adioses!

Les preceden miradas de agua tibia

cantos de un mar remoto abismo

donde el alma apenas se adivina

en el débil vapor que del emana.

¡Qué soledad que dejan los adioses!

Les sucede un silencio de flores

amarillas,

de pétalos en vuelo, mariposas

hacedoras de nostalgia que recorren

 

desde la medula del hueso hasta la carne.

En este despertar en que se va

nos deja consignas a lo lejos,

un sol que apenas se levanta

un raro azul, un canto de cigarra

desvelada, como la embarcación

en que se aleja.

 

Antonio Ruiz Ruiz


 

martes, 18 de noviembre de 2014

En la penumbra de esta noche en calma.


 
En la penumbra de esta noche en calma,

en el  débil aleteo de las horas

pasadas voces mi presente llaman,

Pero mi presente es mi pasado

llamarada de un sol que se extingue

con esta lentitud que dan los siglos,

con este cúmulo de imágenes

revestidas de sueño, siempre el mismo:

L a espiral, la misma curva,

La misma cueva ahora edificio,

El mismo dios desvanecido

en el fondo de un óleo,

base en que se sienta el arcoíris.

Cansa la noche con sus sueños todos,

la avenida del diario, la mano diaria

cansa, el amor, la efímera caricia.

El pan que diario se lleva a la boca.

¿Cómo entonces del tedio de los siglos

la esperanza

 se renueva de pronto amanecida?

Qué destino del hombre

se habrá quedado a medias,

qué ojo, qué pie nos hace falta

qué cima nos espera en el centro

de este círculo inútil, ojo fijo,

dormido, siempre abierto

que anhela por una eternidad

mirar en la niña de su ojo

la lágrima  que anega su silencio.

 

Antonio Ruiz Ruiz

sábado, 1 de noviembre de 2014

Esperemos el tiempo


 

  Esperemos el tiempo,

esperemos que llegue con sus frutos

madurados, de luz.

A través de la ventana

miraremos llegar las estaciones,

florecer la bugambilia,

llover estío en las aceras

donde yacen las huellas de tus pasos

Y los míos,

beber de la fuente del sol las mariposas

y lo niños lavarse sus caritas

en las primeras lloviznas del verano.

Miraremos las hojas dorar las banquetas

y advertiremos el frio con abrigo y bufanda

y un trago de ron y una mirada

cómplice que nos descubra,

Desnude,

desde cálido resplandecer del alma

hasta la misma osamenta simulada

en el apéndice que yazga en nuestras tumbas.

Esperemos el tiempo,

siempre llega,

siempre nace una estrella

por una que se paga.

 

      Antonio Ruiz Ruiz

 

 

 

 

domingo, 12 de octubre de 2014

Vendedora de sueños (Fragmento)

A mi puerta ha llamado
la vendedora de sueños
con su canasto de sobres
amarillos,
ha llamado mientras miro
descender tras la montaña
los vestigios transparentes
de la luna
Y cubrirse entre la bruma
estremecidos de frío
los robustos edificios
de la orbe,
me ha brindado conforme
a sus limpios intereses
rodajas de sol mondado
y bien seco,
encerradas en el lecho
crujiente de los estuches
de colorido aluminio
decorado,
como a propósito pintado,
 como a propósito elegido,
de un mural de impresionistas
sicodélicos,
me he negado al ilícito
acto de comer sin gusto
semejantes orejones
ya salados,
y ha extendido en la mano
en cubica lata encerrada
porciones de noche fresca
y liquida...

Antonio Ruiz Ruiz














miércoles, 13 de agosto de 2014

Duerme





Duerme,

En tu regazo lacta la esperanza,

Germinada semilla, sueño puro

Que habrá de extenderse hacia el sol.

En tu vientre, acuífera cama

La poesía, eslabón de sílabas

Letras encarnadas,

Deja palpitar su melodía.

Y a este verso lo imagino

Venir hacia mi ya presuroso

Con el torpe andar de su estatura

Con su risa de fruto amanecido.

No quiero suspirar pero suspiro,

En tu rostro dormido la ternura

Es la infante criatura que enmarca

Tu gesto en calma enternecido.

Duerme,

La raíz de tu sueño ha germinado

Te ha inundado te juega en las rodillas

Y cerca esta de soñar entre tus brazos.



                                      Antonio Ruiz Ruiz







martes, 29 de julio de 2014

Me pregunto...



Me pregunto si la lluvia
Habrá de recorrer estas mejillas,
Valle de salinas esperanzas,
Donde danza
La caricia de unos labios.
Pienso
Hundido en el silencio de estas horas,
Que esta mejilla es el mundo
Y el tiempo, una lluvia
De días
Donde danzan,
Los besos de un dios ya olvidados.
En el espejo de agua que ha dejado
La tormenta,
Veo mi rostro reflejarse y me olvido,
Me voy de mí,
Entre estas calles nocturnas
Donde estrellas
Se reflejan
En las charcas que oscilan con el viento.



      Antonio Ruiz Ruiz

lunes, 28 de julio de 2014

Por qué me sigues





Por qué me sigues
Si la noche
Se ha recargado en mis hombros,
Ha llenado mis versos,
Ha despojado la luz de antiguos sueños
Y duerme conmigo a todas horas.
En estas noches modernas
No hay estrellas,
Hay faros encendidos
O apagados,
Insomnios recargados
En el falso amanecer
De la esperanza.
Deduzco ahora
Que mi noche es sintética,
Artificial y ajena,
Pero es mi noche y me acompaña
A plena luz del día.
¿Por qué me sigues?
Mi alma oscurece horizontes,
Roe neumáticos
Precipitados y cae
Inesperadamente,
En medio de las risas.
Mi alma anochecida tiene cuentos
Oscuros,
Mudos,
Y mis pasos siembran
Entre banquetas
Y asientos,
Entre tumultos ajenos
Y niños ambulantes,
Flores negras.


                                         Antonio Ruiz Ruiz







viernes, 25 de julio de 2014

Voy a tu lado...




Voy a tu lado acariciando un sueño,
La ciudad
Vértigo de presurosa indiferencia,
Es cumulo de rostros donde duerme
El gesto amable adusto e impasible,
Mueca de esperanzas prisioneras
En esos rostros ausentes y vivaces.
¡Yo quiero aprisionarme entre los pasos
De esos semblantes idos y sagaces
Portadores de ignotas  esperanzas!
Nacer con ellos en el alba,
Entretejer los sueños que la noche
Sembrara en los rincones del espíritu,
Y alterco ir de mi voz entre sus pasos
Ser el vocero de sus sueños ya perdidos…
                             
En estas otras personas en que somos
Imaginaria creación de los anhelos,
Hay columpios pelotas y jardines
Un niño en la superficie del tiempo.
Heme aquí a tu lado hilando sueños,
Respondiendo en silencio a tu pregunta:
<< ¿Qué haremos ahora?>> y te respondes
<< Sigamos componiendo el mundo…>>

                       
                      
                                         Antonio Ruiz Ruiz


miércoles, 23 de julio de 2014

Agonía




Cuando el asombro acaba,

La muerte,

Asoma por los resquicios

De la puerta.


Antonio Ruiz Ruiz

martes, 15 de julio de 2014

Para que vuelvas





Para que vuelvas,
Prenderé incienso
En la orilla del camino
Donde extraviara tus pasos.
Debajo del semáforo
Que me detuvo,
En el retrovisor empañado,
La baca donde reposa
Una nube embotellada,
Sobre el edificio que despide,
Diariamente,
Esporádicos amantes.
En las ventanas donde asoman
Los poetas y esperan,
Donde duermen las madres,
En los parques,
El poste corroído
De las líneas telefónicas,
En la cantina donde  un brandy
Se consume, periódicamente,
Sin importarle si llegamos o no,
Ebrio de esperar
Ya resignado.
En el templo que habla de mi ausencia,
Junto al dios que miraras dibujado,
En mi costado
Taja donde guardo el pensamiento
Furtivo reducto de tu nombre.
En la calle cerrada,
Detrás del manifiesto
De los inconformes,
En el motín que encabeza el vagabundo
Contra el dedo índice de los destinos.
En el tranvía, el metro,
En la estela imaginaria que dejó tu partida,
Prenderé incienso.

Antonio Ruiz Ruiz 

jueves, 10 de julio de 2014

Calle vacía (Del poemario, poesía en blanco)




Te has quedado dormida en plena tarde
Con un collar de faros apagados
A lo largo de tu cuerpo

¡Que soledad! ¡Que calma tan absurda!
Para este monstruo de orbe que respira
Ansiedad  a cada instante

Los delfines de metal yacen tranquilos
Ordenados en tu piel de negro asfalto
Con sus huellas de mares citadinos

Y en tus ojos-ventanas nadie asoma
Ni el niño ni la madre ni la anciana
Ni el bostezo del tedio ni el sonido

¿Despertaras acaso con la noche?
¿Cuándo la luz del sol haya cesado?
¿Y resplandezcan los faros amarillos?
¿De tu collar noctambulo?

¿O yacerás amante complacida?
¿Desnuda estática ajena al trazo?
¿De este pincel de letras que bosqueja?
¿Tu cuerpo ajeno al sobresalto?

En esta calma de sueño que olvida
El ajetreo de la vida cotidiana
Un pintor de palabras te dibuja
Y un suspiro ahogado se escapa


                  Antonio Ruiz RUIZ

miércoles, 9 de julio de 2014

Un segundo...




Un segundo de ti en este espacio,
Es el tiempo de tortuga que escribe
Su nombre en la arena.
Es una eternidad que encierra,
La brevísima huella del instante,
Es pestañeo, incluso una sonrisa
En la carrera cotidiana
Que emplaza al verso en el presente.
Un segundo de ti en esta tierra
De carne y hueso construida,
Es el pulso necesario que sostiene,
La corriente del río que da agua
A las vides y trigos que alimentan
Unicornios en el alma.
Un segundo de ti no es otra cosa,
Que una estrella fugaz que se anida,
En la niña del ojo, en la memoria,
Y cruza, noche a noche,
El cielo oscurecido de mis versos.


Antonio Ruiz Ruiz

martes, 1 de julio de 2014

Asalariado. No. Asalariado. (Sonetos insurrectos)

                                  



Entre autos detenidos un momento,
Entre rostros ajenos, ojos de hambre,
Caja en mano,  vitrina sin cristales,
 Te has buscado ahora el sustento.

Más no deja en ti de estar atento,
El atisbo de espía  que se abate,
Sigiloso hacia ti con  su semblante
 De bondad y te ofrece alimento,         

A cambio de que cedas tú esfuerzo,
Al grato crecimiento de su empresa,
Y te dice, te alaga, y con el dedo,

Te señala a su hermano el tunante,
Que te empuja sin más a ser obrero,
Con tolete en mano amenazante.


Antonio Ruiz Ruiz

Soledad




Sol 

Edad



Antinio Ruiz Ruiz

domingo, 29 de junio de 2014

si en la noche



Si en la noche más noche que el abismo
Se despeñan mis palabras,
Seguro que una estrella, con el tiempo
Nacerá.                    
Lucirá
Desnuda y blanquecina en el ocaso,
Faro para sueños olvidados,
Con regiones de antaño prometidas.
Y en sus bastas planicies unicornios,
Emisarios del verso,
Donarán a aquellos peregrinos,
Palabras,                 
Nuevas
Palabras, que constelen nuevos cielos.


Antonio Ruiz Ruiz

Al alba...




En la aurora, en este despertar
de ausencias donde escribo,
más que al recuerdo al sueño,
más que al sueño al olvido.
en esta hoja, resplandor efímero,
donde el tiempo murmura
el devenir  del alma,
amanecida fruta
de incandescencia, el alba.
cierro los ojos, fluyo
como un agua que canta,
al unísono canto del espíritu.
y al breve trazo
de signos en la hoja,
muta mi voz y apenas
lo percibo, vuelco
en caprichoso remolino,
e intento suspenderme un instante,
un efímero instante donde pueda,
signar como la aurora,
tus regiones.


Antonio Ruiz Ruiz

viernes, 27 de junio de 2014

vicio

                                                      

Esto que tengo de ti, no es otra cosa,
que el resabio que dejara tu lengua
en alguna parte de mis labios.
es, más que la caricia de tan ligero
órgano del gusto, la secreción mágica,
resumen de tu ser y de tu cuerpo,
la que me atara a ti, desde la carne
hasta la letra inicial de mis versos.
es la sed necesaria, el apetito,
que pugna con el café, el cigarro,
y estas horas sin ti que son ensueño.
esto que dejara en mi boca
la sencillez de tu beso,
se ha transformado, sin quererlo,
como el proceso de la metamorfosis,
en algo que decir, decir no quiero,
porque es tan común ya la palabra,
que temo que al decirla se confunda,
con esta pila de voces que reclaman,
significados distintos al apego.



Antonio Ruiz Ruiz 

martes, 17 de junio de 2014

Vérsame (Sonetos insurrectos, febrero del 20014)


                                                             


Si razón no tuviera la poesía
si rimando a los cuerpos no se aclama
a encender en su espíritu la flama
de mirar más allá de este día

qué sentido tendría que versara
de tus labios si no tiene la caricia
de una frase rebelde que besara
con descaro el luchar con osadía

vérsame pues en esta cofradía
que levanta su puño en amenaza
contra el rostro brutal de la injusticia

y tu canto se escuche en esta plaza
acentuado de inquieta alegría
abrasando a los cuerpos de esperanza


                        Antonio Ruiz Ruiz

lunes, 9 de junio de 2014

Purifícame

                                       


Quita de mis ojos, cuervo, la pupila,

con tus alas de ígnea transparencia
abate mi alma de sueños confundida,

y de este cuerpo arranca los tatuajes
¡Bórrame de la piel estas caricias!

alada forma de la noche misma
que el pico del silencio
en la memoria clavas,

¡Remueve la ceniza, apaga esta brasa!
que es el ojo que expía
 mi andar desde la infancia

Incéndiame de olvido, grazna
embajador de la muerte,

¡Mata estas palabras!

Este eco que se extiende
eslabón de imágenes gastadas

por los dédalos de un tiempo
que me alcanza, en este espejo
donde desnudo el  alma,

Como a la vid extirpas la uva codiciada
¡Arráncame de mí la piel con la escafandra!

Que solo la osamenta como luna opaca
yazga frente al sol cuando amanezca

y si ese hueso
si ese esqueleto en el tuétano aún guarda

tantito de memoria, tantito de sus besos
con el último aleteo de la noche en la alborada

¡Calcina hasta el aliento que su nombre exige!
¡Calcíname hasta el polvo óseo de la nada!

Y después
si existe acaso el salmón de los regresos

haz que me expulse en un puerto
donde el recuerdo sea nada

aunque tenga que andar por esas tierras
aprendiendo apenas

la forma abstracta de un nuevo  lenguaje

                     Antonio Ruiz Ruiz


sábado, 7 de junio de 2014

Decir...

Decir, decir palabras,
frases, versos,
decir, decirse al oído,
en arrebato esquizofrénico,
decirse nada.

Decir: la noche es  llamarada
de un sol negro,
decir te amo,
decir de desdiciendo,
todo lo que el viento lleva,
es un rumor de voces en el tiempo.

Decir sin decir,
decir haciendo,
son estas huellas,
incandescentes en el cielo.




Decir por decir,
daña más que el silencio.

Mal  decir,
es expresar con error lo que ahora siento.
maldecir, son anatemas,
hablar mal de alguien sin sustento.
arrebato del ánimo.
efluvios del rencor
decir grosero.

Voy a decir sin decir
lo que ahora siento,
a quedarme callado,
a mirarme al espejo,
a rumiar en mi alma
a rumiar
a rumiar
decir sin eco,
en silencio,
estas palabras,
que de tanto rumiar,
las he olvidado.
 Antonio Ruiz Ruiz

jueves, 5 de junio de 2014

Esencia y el mar

                                                                                                                 Poemas para Esencia





Sobre las aguas del mar de tu memoria
a pasos cortos mirada inquisitiva
llegas para mí que yago estéril
a la espera de tu voz que ya se anuncia

Sobre la cúpula de un quiosco heridas nubes
sor los rayos de un sol que ya prescinde
donan su arrebol a tu llegada
donde el lácteo aroma de tu cuerpo
son párvulos capullos que enredan
a Grenouille
hechicero hacedor de los perfumes

Y en medio de este parque atiborrado
de de la falacia humana al fin resulta
cumulo  del canto de las aves, tu voz

Te veo sirena en ella contemplando
al piélago pescador que entre sus redes
lleva a la luna ostia del poeta
hasta la duna casa de tus pasos

Te veo giganta erguirte sobre ella
oceánida virgen que en tu coro
se halla el canto del mar profundo y cierto

¿Qué te aleja de tu casa caracola?
Que evocas ansiosa y determinas
en segura mirada estar en ella

¿Qué horizontes del mar a ti te llaman?
¿Qué regiones claman tu presencia?
Mira  la noche llegar a esta plaza
donde exquisito yace el sonido
de tu andar que se aparta ay ondina
hacia un puerto cubierto ya de luces
don del mar de tus sueños ya te espera
con su barca de salmos anegada


           Antonio Ruiz Ruiz 

Paisaje urbano



El día es una gota de agua derramada
que en el cristal dejará su huella efímera

“Son lágrimas de Dios” decía mi madre
y yo sentía en el alma sus sollozos

Pero este día, en el alma, nadie llora
tan solo en el cristal hila el agua
un eslabón de versos invisibles
y una  mano de niña se alarga
con la esperanza de ver en ella un peso

No son sus ojos tristeza ni quebranto
(Aunque sus gestos digan lo contrario)
tiene en la mirada un agua congelada
y un estertor de trueno en la barriga

Y está mojada / como una rosa negra sin espinas
que apenas miran su nacer en otra aurora
    
                          Antonio Ruiz Ruiz                     


martes, 3 de junio de 2014

Mujer con piercing y esperando



Te agujereaste la ceja
la nariz, el labio
el lóbulo erótico
el clítoris y aquí,
sentado sin esperar
que el mundo se derrumbe,
ausente del pasado
sin sueños, me pregunto:
¿Te habrás agujereado el alma?

La tarde tiene la prisa de la sed,
y el hambre
aglutinada en la mesa se devora
otros cuerpos de hambre acaecidos,
esto no es canibalismo,
es una res porcionada
rebanada en bistecs
donde el nombre, su nombre
bifurcará el camino de los adjetivos
se hará llamar de cualquier modo
rib eye, Sirloin, Cabrería
polisemia magistral del lenguaje
que en mil formas ahora la pronuncia

Si me alejo de ti no es que te olvide
son solo distracciones pasajeras
como estas horas que nos hunden
en el silencio del alma
este silencio de nostalgia que emana
por los ojos todo cuando llueve
¿Te agujereaste el alma?
Niña no de mí sino de otro
ese otro que esperas
con la impaciencia rondándote la cara
¡Que efímera es la moda!
no así el estigma,
estas cicatrices que ahondan la memoria
para siempre

La tarde es ahora
un vaso de agua derramada
donde resbalan
peces de cuero y suela dura
y uno que otro con tacones salta
delfín cantador de charcas idas
que al ras del asfalto muere solo

¿En qué parte de tu alma el orificio
Será la mortaja del recuerdo?
y de ti me voy y a ti regreso
y en tu cabello de uvas coloreado
pierdo el silábico ritmo de mis versos

Si el alma pudiera agujerearse
¿En qué parte de ella haría el piercing
La incandescencia efímera del sueño?
la moda es pasajera
aunque no aborde el metro,  ni el tranvía
ni el micro bus, ni el taxi
ni la chalupa Xochimilca embriagadora
ni el avión que vuela a tierras ígneas
o secas o apagadas
gélidas o arboladas
como este paisaje pues que constituye
¿El alma?

 ¿Te agujereaste el alma?
Ten cuidado con las huellas
que en su amorfa figura un día se plasman
son indelebles, imborrables orificios
por donde suelen escapar  las lagrimas

La tarde se ha marchado
y la sed y el hambre y los peces
¿Quieres acaso ser la esfinge de la noche?
No esperes más y vete
que el camino también se anda a solas

Antonio Ruiz Ruiz


viernes, 23 de mayo de 2014

Dormiré sin ti


Dormiré sin ti, aquí a mi lado

despoblado de sueños

viene el recuerdo a estar conmigo

¡Que singular presencia de los días!
Una piel se acaricia sin pasado
entregada al efímero suceso
Sin mañana, sin tarde se desliza
reflejo fugaz y repentino
incandescente resplandor eternizado
Soy el mutismo de ti, aquí, a tu lado,
brasa de tu beso,
punza en el silencio sin edad.
Soy la mano de un dios que toca un cuerpo
de luz, de meteoro, repentino,
creación de su antítesis desolada.
Y duerme con la ausencia maniatada
en esta oquedad de su costado
sin diosa ni luna, sin espejos.
Con el solo estar de un recuerdo
que no deja de arder, de consumirse
sol enano, en la penumbra de la noche.
Antonio Ruiz Ruiz

lunes, 12 de mayo de 2014

Vive (Sonetos insurrectos)




“Vive el día despojado de anhelos”

así te enseña ahora la serpiente

“disfruta sólo del febril presente”

“que mañana quizá no constes vivo”


y diciéndote afila sus colmillos

y prepara la toxina indulgente

¡Que hermoso reptil inteligente!

¡Remueve de la vista ya su brillo!


“Con esto vivirás aquí en mente”

“amante del haber siempre sencillo”

“déjame para mi sentir la fiebre”         


“de trazar a los otros su destino”

 así diciendo te deja a la muerte

con pase magistral del hipnotismo


Antonio Ruiz Ruiz

domingo, 11 de mayo de 2014

Escritura



                 

Trazo en tu cuerpo símbolos del insomnio

esas mil y una estrellas que nadie mira

estas mil y una letras que nadie escrutará


Tiento en mano danzo en la penumbra

de tu cuerpo ensombrecido en los bordes

donde ecuatoriales lluvias de prejuicio

se consumirán en tabúes rencorosos


En éste contorno de turbios cabellos

pinceladas acuosas que la noche brinda

en el albo valle la mirada torva

en el final del ritual halla el inicio


He deslizado mi mano por tu rostro

he dibujado tu cuello sin sentirlo

con estas lenguas de letras que en tus hombros

rodean la cuesta nívea de tus pechos


Lamo en tu pezón el enigma inmundo

ávido de ti, hambriento, agobiado

ciego olvidado en el valle de tu cuerpo

arropado de blancas vestiduras


Desde éste tu pezón que así se erecta

tejido de los signos que balbucen

en dactilológico juego soledades

la mirada recorre el blanco océano

que al pie de tus colinas se ensancha

hasta la isla de Venus seductora


Sucumbo al vértigo abismal de tu océano

repto en tu piel como una salamandra

dejando en el océano de tu cuerpo

mil y una larvas jugando en tu epidermis

mientras hambriento busco al fin la costa

nocturno litoral de escuálidas palmeras

donde un río de sueños se desborda


Ya en éste cause de quiméricas visiones

náyade mi alma canta en la penumbra

de estos finos y oscuros filamentos                          

las obsesiones mismas de la carne


He descifrado el misterio de tus aguas

con las estelas oscuras que mis dedos

en demencial arrebato escribieran

en la exaltada superficie de tu vientre


Crepita mi alma reman mis pulgares

desde la suave ingle hasta tus nalgas

donde desmayan libidos enanos

en el almíbar final que tu organismo

en esta simbiosis me ha devuelto


Tritón de tu abismo en ti me hundo

unísono al gemido de tu canto

y en larga exhalación mi mano escribe

al pie de este tu cuerpo ya mi nombre


El alba ha despertado en éste grito

y en éste amanecer a ti me vuelvo

a entregar en este juego interminable


No me importa que el mundo se confunda

y surjan en la acera traicionados

precedidos por el rezo balbuceante

de este gemir de cantos en la aurora

el autómata ser de la costumbre

con sus sueños remándole en la frente

     Antonio Ruiz Ruiz

sábado, 10 de mayo de 2014

Insomnio




Vuelve en la noche apenas la mirada

del sueño, a contemplarme,


grazna como un cuervo herido,

y sus alas de murciélago pasean 

por estos edificios-


Es la memoria vapor de estas lloviznas,

Aliento de la tierra en la montaña,

¡Ay! humedad, vacío, entraña,

lenguas de mar que abaten el olvido

en esta blanca estancia donde todo

resplandece en la ausencia y el silencio.

El ojo de un cuervo me vigila,

y  yo que soy

aliento, lluvia, noche,

me pierdo en entrepaños  de recuerdo.


                                Antonio Ruiz Ruiz

viernes, 2 de mayo de 2014

impotencia


Fue glacial, glacialmente letal,

entro por la ventana, las puertas,

 los resquicios,

 por el pensamiento, el sueño,

el substantivo.


Afasia,alada hija de cuervo

silenciosa,

tienes tú, nombre para nombrarte,

tienen los ojos vacíos adjetivo,

el oído tapado,

la nariz saturada,

todo tiene un nombre,

¿Cómo  llamar entonces al no poder escribir?


Solo sé que la impotencia

me congela desde entonces

Antonio Ruiz Ruiz

jueves, 1 de mayo de 2014

Infértil


    


Hay un vientre sellado sin más sueños

que el soñar a los hijos en la aurora,


una tierra que no da sino espigas

que no harán del pan dulce bocado,


uvas de etéreo vino fermentado

en barricas de roble de su alma,


donde se oye el cantar de las sirenas

como un canto maldito que en él ata


la impotencia de arrullar entre brazos

un pedacito de carne, un cachito de alma,


pero ¡ay! ¡qué tristeza se siente!

cuando el hambre

mete en la cama la añoranza


Antonio Ruiz Ruiz

jueves, 24 de abril de 2014

Dibujo





Quiero dibujarte deletreándote,

escribiéndote...


Pero no alcanza a la palabra los matices,


Inventaré un nuevo abecedario.


               Antonio Ruiz Ruiz

miércoles, 23 de abril de 2014

Amanecer en el colegio (sonetos insurectos)



                                                                      


Incendiadas ventanas en la aurora

oscilación de velas en la orilla

de la falacia social cosmopolita

que despierta al rugido de la roca


¡Que seducción dental en esa boca!

¡Tiene la bestia que aun adormecida!

¡Cautiva al hombre con mirada fija!

¡Y le engulle similar a una mosca!


En este despertar que así nos troca

del libre sueño de ser en pesadilla

una pequeña come una “guajolota”¨*                         


y con triste llanto a la madre mira

soltarle de su mano poco a poco

y dejarla a los albores de la vida
Antonio Ruiz Ruiz
* torta de tamal